Si todavía no has visitado Galicia, y lo que es más importante, no has tenido ocasión de disfrutar de nuestra completa cultura de tapas, el encanto de nuestras cocinas, bares y furanchos o la magia de nuestras ancestrales recetas, deberías preparar tu paladar para una fiesta de fuegos artificiales.
La comida gallega es inseparable de nuestras gentes, de la geografía y los paisajes, de las tradiciones y los refranes, de la retranca y de la cultura popular, de la alegría y de los vinos, de las familias y los grupos de amigos reunidos en romerías, fiestas gastronómicas y múltiples eventos.
En este artículo recuperamos algunos de los platos más comunes en los pueblos gallegos y que deberías conocer -y sobre todo probar- cuando pises nuestro suelo.
Pimientos de padrón: ¡Se sirven muy calientes y nunca hay que cortarles el rabito! Son uno de los aperitivos más habituales de Galicia, además de uno de los productos más preciados de la tierra, procedentes de esta pequeña localidad coruñesa que les da nombre. Su preparación es muy sencilla, ya que solamente hay que lavarlos y secarlos bien y freírlos durante un par de minutos con abundante aceite de oliva, agregando únicamente un buen puñado de sal para que estén deliciosos. Recuerda que, como dice el refrán, “uns pican e outros non”.
Pulpo á feira: Sin duda, no te puedes ir a Galicia sin probarlo. Este manjar tan característico se conoce en el resto de España como pulpo a la gallega y está presente en toda aldea, pueblo, reunión o romería de nuestras tierras. Primero es preciso ablandarlo, se cuece en un caldero de cobre -el tiempo depende de su peso- y se sirve en rodajas con aceite de oliva, un buen puñado de sal gruesa y pimentón, en plato individual de madera como manda la tradición.
Lacón con grelos: Especialmente típico en enclaves como Lalín y asociado al Carnaval y sus fechas colindantes, este plato es una de las estrellas de la cocina gallega por antonomasia. Su preparación requiere tocino, chorizo, cachelos y, lógicamente, lacón y grelos -que también es habitual que sirvan de relleno para empanadas-. Durante su cocción se emplea grasa para conferirle un sabor especial al caldo.
Lamprea: Uno de los productos del mar más exquisitos, aunque se trata de pescado cuya limpieza no es fácil. De exquisito sabor, guarda cierto parecido con la anguila. Tradicionalmente se suele cocinar a la cazuela y acompañarse de pan frito y arroz blanco.
Androlla: Junto con otros habituales como el chorizo, es uno de los embutidos más destacados de Galicia, especialmente de las provincias de Lugo y Ourense. Su contenido procede de la costilla y las pieles del despiece del cerdo, trozos magros de carnes saladas y adobadas con pimentón picante, pimentón dulce y ajo. Al ser sometida a un ahumado con leña de roble durante diez días y secado otros veinte, da como resultado un embutido ahumado y curado exquisito, de sabor dulce y picante al mismo tiempo.